Valladolid Paris: diez minutos de retraso (mas intereses)
Backpacking is the way…. Eso fue lo que aprendí en primero de bachillerato, a soñar despierta con un tren, a coger un tranvía para llegar al instituto, a contagiar a mis amigos ).
Y lo conseguimos no tan tarde…y dormimos en un compartimento estrecho y traqueteante…en el vagón 61, con destino a París y a replantearme si de verdad me hubiera gustado ser intérprete o simplemente quiero hablar idiomas, comunicarme…no comunicar sin más.
Llegábamos tarde para el Jazz de Montmartre, tarde para la ola de calor, para los disturbios callejeros e incendiarios…pero no tarde para la luz gris azulada, para el mimetismo roto por el rosa atardecer o la enredadera en la ventana. No tarde para los empujones con japoneses, para los cafés olé, para buscar boulangeries y supermarchés…no nos resignamos a que fuera tarde para ir a eurodisney … Llegamos cinco minutos tarde al musée d’Orsay (A Degas y la pequeña Bailarina –mi cuento favorito de pequeña-).
A Bruselas llegamos justo a tiempo para saber lo que es el metrotram, para el espectáculo de luz, música y tiempo de la Grand Place, para planear ir a Gante y acabar en Luxemburgo (para ver un país en dos horas y comprar la postal más pija de la historia)…para dormir en el mejor hostel de todos y contagiarnos del espíritu de las guías de viaje (al menos la mitad de nosotros)…llegamos tan a tiempo que no importó que fuera tarde para el Palacio de Bellas Artes.
En Ámsterdam nos acogió una lluvia de final Made in Hollywood, prematura…demasiado prematura…llovió tanto que ni siquiera pudimos guarecernos en La Habitación de van Gogh o los repetitivos bocadillos de salchichón y queso (Backpacking tenía un precio)…
Y Brujas, embrujada en el tiempo, quitándole todo significado a la s campanadas del reloj, con el sonido de los carros de caballos, las encajeras eternas e impasibles, un restaurante español en medio de la calle, la prisa por cerrar a las cinco de la tarde (llegamos tarde a gante, una vez más)…
Y tardar 48 horas desde que abandoné el Hotel hasta que llegué a casa (un tren con tres horas de retraso)…Brujas-Lille-Paris-Portbou-Barcelona-...Zamora
1 comment:
en cambio yo llegué justo a tiempo para descubrir la ciudad mágica de los rubios imponentes...la cosmopolita, grandiosa y trágica Berlin :)
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