Saturday, May 26, 2007

(un cuentito por encargo)

Paula y Susana tenían tres y cuatro años cuando se conocieron.
Al principio no se caían muy bien, su amistad era más bien cosa de sus madres, de cafés todos los domingos y tardes de charla y un rato de jardín.
Ninguna de las dos entendía muy bien la euforia de sus progenitoras. Todo había empezado en el Metro, con un aroma familiar, de nombre francés y esencia de lavanda. Compartir ese aroma supuso el principio de una gran amistad.
Poco a poco pasaban los años, de cincuenta y dos en cincuenta y dos domingos, a los que no tardaron en unirse primero los sábados por la tarde y luego las noches de los viernes. Porque las niñas crecían y poco a poco doblaban las esquinas de la ciudad y llenaban de canciones las calles de Madrid.
Fue un sábado por la tarde que las chicas decidieron hacerse una foto en el fotomatón del Metro, en la misma estación donde todo había empezado. Pero quiso la suerte que existiera la fuerza de la gravedad, y quizás también la ley de Murphy o la fuerza de la casualidad, y la foto escapó del bolsillo de Paula para ir a parar al suelo negro y pisado del pasillo de la estación.
Así fue como encontré la foto

6 comments:

botas de agua said...

mmmm me gustó este relato... ¿así que se admiten encargos? Nunca lo dije, pero lo digo ahora. Me encantan tus etiquetas. Saludos.

amandine said...

linda, tan tierna como siempre.
tan directa a la emoción.

Gracias a quien te encargó el relato.

Un beso y un sueño; no estaban encargados pero aquí llegan...

botas de agua said...

no! no conozco la del barco ebrio! de hecho no he conseguido el libro (aún). Me puede la intriga... cuéntame, por favor.

Irene said...

Me recuerdas a Amélie y sus aventuras con el fotomatón.
Bonito cuento,dule y perfecto como siempre.
Un beso ;)

Anonymous said...

gracias por escribirlo.
gracias por cumplir el encargo.

me ha parecido precioso.
gracias de nuevo.

pepa said...

siempre es tan intrigante todo lo que escribes, en cada pausa nunca se sabe lo que sucederá. Estás tan llena de historias!

Me encantan los relatos breves y las historias de fotos.
=)

un abrazote!