Thursday, May 17, 2007

what i can read between your lines

Una vez tuve una mano con diez dedos.

Y tuve también una risa relajada.


tuve el blanco, el gris, el amarillo, el azul de las nubes en los ojos.

Tuve una sombra bicéfala, y una bufanda de colores que dejar olvidada.


Pero no me di cuenta, y me bajé en la estación, diciendo adiós sin pañuelo, ni bufanda, ni mirada ni mano que se agita.

5 comments:

espiralproscrita said...

yo una vez tuve tuve una sombra bicéfala, tres cabezas, y más de 4 antídotos para el amor sin precedentes.
y sí, sucedió algo parecido.
Me dejé media sombra, dos cabezas, y, los 4 antídotos, en aquel tren.
Ahora me siento más ligera, a veces. Excepto porque el amor pesa horrores algunos días contados.
Me he enganchado a esto.
Un abrazo.

DANI said...

Pero te vimos, alejarte pequeñita sin decirte nada..en silencio

Besos

Ezequiel said...

yo una vez tuve una melodia..


y se desafino...


que hermoso lugar que encontre

besos

Tristancio said...

Pero siempre regresamos a la estación, para dar bienvenidas, con pañuelos, con bufandas, con miradas, con una mano que se agita...
con palabras en un blog...

amandine said...

Una vez tuve un sueño...
y al despertar, caí al mar...
y me ahogué...
...y entonces llegaron otros sueños amarrados al canto de los peces que habitaban el atlántico abismo de la vida sin sueños.

Y cada escama, un beso.
Y en cada mano, una realidad.